lanzarote. El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ofreció ayer a la activista saharaui Aminetu Haidar la posibilidad "excepcional" de obtener la ciudadanía española para resolver la huelga de hambre a la que Haidar se encuentra sometida desde hace catorce días en el aeropuerto de Arrecife (Lanzarote) en señal de protesta tras ser expulsada del Sáhara Occidental por Marruecos. La oferta está siendo estudiada por la activista, cuyo estado de salud empeora por minutos.
En la primera conversación directa tras el inicio de la huelga de hambre, Moratinos trasladó a Haidar la posibilidad de concederle la ciudadanía española "como medida excepcional". El ministro, quien expresó a la activista "su más profunda admiración", también presentó otras dos alternativas: la concesión del pasaporte marroquí a través de las autoridades competentes del país alauí en España, o bien la concesión del estatus de refugiada para ella y su familia.
El titular de Exteriores anunció que, a tal efecto, hoy se desplazará a Lanzarote su jefe de gabinete, Agustín Santos, para discutir "con tranquilidad" las tres opciones posibles. Moratinos espera que Haidar acepte una de ellas y que, con la llegada de Santos, se produzca un "comienzo de solución" a la situación de la activista.
reproche "Hemos tenido una buena conversación en la que le manifesté la voluntad del Gobierno español de tratar de ayudarla, comprender su legítima reivindicación política y que, desde el principio, se ha buscado una solución", relató Moratinos a la prensa desde Bruselas.
"Haidar le ha contestado (a Moratinos) que lo ha oído y lo ha atendido por cortesía y educación, pero le expresó su indignación y rechazo por el mal tratamiento que el Gobierno de España le ha dado durante estos 14 días en huelga de hambre y 16 días en territorio español y que absolutamente nadie del Gobierno de España se ha puesto en contacto con ella", explicó la abogada de la activista, Inés Miranda.
En este sentido, Moratinos, que indicó que volvería a hablar con Haidar si fuera necesario, lamentó no haber podido comunicarse con ella hasta ayer por razones "no explicadas". "Lo importante es que hemos hablado, nos hemos escuchado el uno al otro, ella ha manifestado su decepción por la actuación del Gobierno español y yo lo que ha sido el comportamiento del Gobierno", zanjó.