Beasain. Familiares, amigos y compañeros, así como la corporación municipal de Beasain y una amplia representación institucional se congregaron ayer en la rotonda de Zaldizurreta de la citada localidad guipuzcoana, donde ETA asesinó hace ocho años a los ertzainas Ana Isabel Arostegi y Javier Mijangos mientras regulaban el tráfico. Un sentido homenaje que consistió en la inauguración de un monolito erigido, en el lugar del atentado, por el Ayuntamiento beasaindarra, en memoria de estas dos víctimas de ETA.
En el acto, que tuvo lugar pasadas las 19.15 horas, asistió una amplia representación institucional, entre los que se encontraban, el consejero de Interior del Gobierno Vasco, Rodolfo Ares, acompañado por varios responsables de su Departamento, como el viceconsejero de Seguridad, Rafael Iturriaga, el director de la Ertzaintza, José Antonio Varela, y la directora de Atención a las Víctimas del Terrorismo, Maixabel Lasa. Asimismo, estuvieron presentes la presidenta del Parlamento Vasco, Arantza Quiroga, la presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Rafaela Romera, el presidente de Eudel, Jokin Bildarratz, y otros representantes políticos.
Todos ellos guardaron un minuto de silencio, tras lo que tomó la palabra el alcalde de la localidad, Patxi Plazaola (PNV), y la artista Mari Carmen García, autora de la obra. Durante el acto, se hizo entrega, además, de sendas pequeñas réplicas de la escultura al esposo de la ertzaina asesinada y a los hermanos del agente que fue tiroteado junto a ella.