vitoria. La reelección de Alfonso Alonso al frente del Partido Popular alavés dejó ayer un nítido mensaje a los socialistas para que respondan al apoyo determinante que la formación conservadora brindó a la investidura de Patxi López con la misma moneda tras las elecciones forales y municipales de 2011. Esta es la clave que persiguen los populares para situar al frente de las dos principales instituciones del territorio a Javier de Andrés -secretario general- y al edil vitoriano Javier Maroto -desde ayer nuevo vicesecretario y portavoz del partido-.
Sobre este eje argumental giró el discurso de Alonso tras recibir el 92% de los votos emitidos por los 250 afiliados que se reunieron en el XII Congreso del PP alavés. El ex alcalde de Vitoria, acompañado para la ocasión por el presidente regional, Antonio Basagoiti, y la portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, entre otros, defendió la unión de Álava al "cambio" emprendido por los constitucionalistas en el País Vasco, un proyecto que "no tiene marcha atrás" y que forma parte de las "desnacionalización" que Alonso observa en la población alavesa.
El presidente del PP alavés enmarca esta impresión en la propia historia de la provincia, un territorio, a su juicio, que siempre ha servido de "punto de engarce" entre el País Vasco y el resto del Estado y donde el PNV es "una reliquia del pasado".
Bajo estos mismos parámetros, Basagoiti aseguró que la política de cambio plasmada en el Parlamento Vasco tiene una "cuenta pendiente" con la sociedad alavesa, una puerta que, en su opinión, los socialistas cerraron "de forma interesada" al no apoyar la moción de censura que el PP pretendía plantear contra el diputado general, Xabier Agirre, y que los populares abrirán
La receta para el cambio, está supeditada a que sus dirigente sean quienes encabecen el revelo del actual Gobierno foral jeltzale, de forma contraria a la fórmula que impera en el Ejecutivo vasco. Para conseguirlo, y según cuáles sean los resultados electorales, deberán convencer a los socialistas, que en la ponencia política aprobada ayer reciben los calificativos de "arrogantes" y víctimas de "cuestiones electoralistas".
En relación al PNV, Alonso recuperó el cese del diputado de Aralar, Javier Aspuru, como una muestra de la "debilidad" del Gobierno foral y la asociación que Agirre diseñó con este partido y Eusko Alkartasuna. Además, el portavoz adjunto del PP en la Cámara baja amplió sus críticas a la postura que los jeltzales mantienen en esta institución, donde su apoyo a los Presupuestos Generales elaborados por el Gabinete de Zapatero conceden una "comodidad" al PSOE que, en opinión de Alonso, convierte al PNV en corresponsable de las medidas adoptadas por el Gobierno español.