Nuestra tía Vitori ha pasado sus últimos años de vida, que han sido muchos, en vuestra residencia y os podemos asegurar que sin lugar a dudas han sido los más bonitos y felices de su vida. Es por ello que queremos agradecéroslo desde lo más profundo de nuestros corazones tanto en su nombre, que de sobra sabéis estará de acuerdo, como en el nuestro propio. Hay que reconocer que sois un grandísimo equipo y decir a los cuatro vientos con cuánto esfuerzo, cariño, dedicación… desarrolláis vuestra labor. Que sepan nuestras instituciones y autoridades que tenemos unos servicios y unos servidores que hay que cuidar con mucho mimo, lo dan todo. Estos últimos días y aunque su fallecimiento no está vinculado a la pandemia, han sido muy difíciles. Así y todo nos lo habéis hecho vivir con tranquilidad, informándonos puntualmente y dándonos ánimo y cariño. Siempre hemos sabido que la tía estaba en muy buenas manos.