Me gustaría transmitir mi malestar por la medida tomada por el Gobierno Vasco, de cancelar las visitas a los enfermos por el covid-19, ya que el Gobierno Vasco, quien nos pide que no se cierren todas las empresas del País Vasco, el mismo que pide que vayamos a trabajar, es el mismo que nos prohíbe ir a ver a nuestros familiares enfermos al hospital. Qué incongruencia, ¿no?Esos mismos que nos han prohibido ir a ver a nuestros familiares, deberían ver la cara de felicidad de mi ama, cuando me ve entrar por la puerta de su habitación a las seis de la tarde. Es la única hora al día, en la cual los enfermos son medianamente felices, el ánimo les sube todo lo que se les baja y un peldaño más, durante las otras 23 horas del día. Por favor, necesitamos que nos escuchen, ya que nuestras visitas son parte de la medicina que necesitan para recuperarse. Necesitamos ver a nuestros familiares hospitalizados. Nos necesitan.