En su empeño por librar todas las batallas, Isabel Díaz Ayuso va a acabar siendo su peor enemiga. Lo que ha sido capaz de decir después de ser nombrada presidenta del PP sobre las mujeres es bastante peligroso no solo porque da alas a los agresores, también porque rompe un consenso para alegría de Vox y otros antisistema, alcanzado con esfuerzo: “Ayuso carga contra el feminismo del Gobierno: Su forma de ver la vida propia de malcriadas que aspiran a llegar solas y borrachas, desprovistas de responsabilidades ni siquiera ante sus peores decisiones, nos abochorna a la mayoría de las mujeres” (El Huffington Post).