Cansados, sí, pero de quienes se quejan

Tiene toda la razón Quique Peinado: “La ola esta nos ha cogido a todos y todas muy hasta los cojones y anda que no se nota”. Personalmente, a mí me ha cogido cansado de oír y leer a quienes saben qué hay que hacer y qué, no. A quienes se creen que los presidentes autonómicos, rodeados de expertos, saben menos que ellos, que leen hilos en Twitter. A quienes reclaman más inversión en Salud y no son conscientes de lo que cuesta una PCR en el sistema público (y en la CAV se hacen 15.000 al día). A quienes creen que sus ratos en Twitter desde el sofá son equiparables a las jornadas de las y los responsables políticos y sus equipos.

¿Hay que esperar al colapso?

Quienes se ríen de las recomendaciones sanitarias (el documento del Gobierno Vasco es bastante lógico y comedido, dadas las terribles circunstancias) y se quejan de las medidas que se proponen (hoy no habrá nada radical porque Pedro Sánchez deja las malas noticias siempre a los presidentes autonómicos), ¿a qué esperan, al colapso? Todas las medidas de protección, todas, son eficaces en mayor o menor grado, por eso las recomiendan los expertos y los presidentes las piden. Y el objetivo de todas ellas es el mismo: evitar el colapso sanitario. Un colapso que no se evita con más dinero sino con más precaución.

Pedís más zendales

La única presidenta que ha respondido a la demanda más reclamada en Twitter y, seguramente, en WhatsApp, es Isabel Díaz Ayuso: la gente podía seguir haciendo lo que le diera la gana mientras ella construía un hospital específico en medio de la nada. Luego hablamos de la primera línea de defensa de la sanidad pública madrileña. Pero esto es lo que piden muchas y muchos exhibiendo un comportamiento infantil: una inversión específica para atender las consecuencias de la pandemia sin pensar ni tuitear que lo más eficaz y lógico es no contagiarse de un virus que mata y muta.

Madrid es Madrid

En 2021 la plantilla de Osakidetza cuenta con 4.000 profesionales más que en 2019, antes de la pandemia. Y en lo que llevamos de sexta ola, el departamento vasco de Salud ha contratado a mil personas más para, entre otras cosas, ampliar el número de rastreadores. Estos son datos de Osakidetza, no de un tuitero que hoy es sindicalista y enfermero y, hace quince días, vulcanólogo y experto en evacuaciones. Lo que pasa en Euskadi es esto. Lo que pasa en comunidades como Madrid es otra cosa, pero repetir y generalizar lo del desmantelamiento de la Sanidad como un mantra da retuits y alivia conciencias.

O me toma por tonto o…

Quien tuitea algo así o no se entera o quiere que los demás no nos enteremos: “Aceptar la mayor restricción en derechos civiles en 100 años de historia”. A Franco y a Abascal les gusta esto. “Aceptar el mayor recorte en servicio sanitarios”. 15.000 PCR al día, 4.000 sanitarios más. “Aceptar que el mercado tiene que seguir en el centro y no los cuidados”. Las vacunas se han desarrollado con inyecciones de dinero público. “Aceptar el pasaporte y criminalizar a las personas no vacunas: es una burrada”. No, es necesario señalarles y, si tenemos oportunidad, reírnos de las y los negacionistas de la vacuna, la mascarilla y el Pasaporte Covid.