Comienza la tabarra electoral. Sánchez dice que votar a Podemos es votar contra el PSOE, perogrullada evidente, ya que él pactó con Rivera. Si Iglesias regalase un 40% de su ego conseguiría mejores cosas y Ciutadans no sé que espera para unirse al PP, porque el centro no existe. El poder interino, que acabó con la clase media que es la que mueve la economía y destrozó lo conseguido en 40 años de lucha, promete lo que incumplió, las promesas del 2011 que volverá a incumplir. Nada nuevo.

Utilizan Venezuela, a más de 7.000 km., para atacar a los rivales con la inestimable ayuda de los medios afines. Los atacados tienen sentencias absolutorias y otras archivadas, pero es igual, seguirán siendo culpables. La caverna es de piñon fijo. Hay quien ha ido a Venezuela quizá a promocionarse políticamente o para hacerse la foto (Rivera, Felipe), pero quien ha estado con discreción en Venezuela hablando durante dos horas con el opositor encarcelado ha sido Zapatero, sin ninguna bulla mediática ni publicidad previa; por algo será. A lo mejor es que él si es de fiar, porque la vieja socialdemocracia se ha derechizado y ahora los vemos y oímos en las cadenas y emisoras ultras diciendo cosas que avergonzarían al propio Pablo Iglesias Posse, fundador del PSOE y UGT. Todo vale para criminalizar al contrario, con adjetivos, con mentiras chapuceras que son descubiertas por su falsedad, y con otras lindezas. Si socialismo viene de social, la actual socialdemocracia no lo representa, y el que se considere socialista tendrá que votar a la izquierda, que hoy lamentablemente no es el PSOE. A ver si hacemos un país decente, y dejamos de ser la nación mas corrupta de Europa.