No es que una lleve una vida en el negocio ni mucho menos, pero mira que en este tiempo me ha tocado ver cosas que jamás creeríais, atacar naves en llamas más allá de Orión, hasta seis convocatorias por falta de quórum para votar unos Presupuestos por el boicot de la oposición, Jaime Mayor Oreja llegando tarde a votar y permitiendo así que se aprobaran unas Cuentas destinadas al no, Presupuestos que salen adelante por un voto equivocado, Cuentas aprobadas a trozos en memorable y bizantina votación... Eran otros tiempos... En fin, superado el momento nostalgia, apunto una muesca más en mi histórico presupuestario: retirada de proyecto a 24 horas de que se someta a las enmiendas de totalidad, a un mucho más que probable rechazo y, por consiguiente, a la prórroga. Porque hay varios axiomas en política vasca. Primero, vivirás cuatro o cinco momentos históricos al año. Esto es como los Barça-Madrid Madrid-Barça, tanto monta, tres o cuatro partidos del siglo por temporada. Segundo: cualquier negociación de calado, tipo formación de Gobierno o Presupuestos, irá precedida de aquello que muy gráficamente acertó a denominar Xabier Arzalluz "ritos de apareamiento", en sus dos vertientes, o hacerte el estrecho o parecer el facilón de la discoteca; ojo, cualquiera de las dos actitudes puede ser mera fachada. Tercero, la responsabilidad de que unos Presupuestos no salgan adelante siempre es del Gobierno... salvo que el Gobierno sea uno mismo. Y todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia, que decía aquél.
