La juventud está preparada y ha asimilado la idea de la democracia. No hay derecho a decirle que "los mayores trabajarán hasta más tarde y vosotros váis a estar muertos de asco". El joven se ve forzado a una ansiedad prematura y a sentirse despreciado por aquellos que han organizado el sistema. Pero la juventud se abrirá camino entre los dinosaurios conservadores. El medio de comunicación es la herramienta, el alma es el potencial.
El planeta padece de egoísmo, prepotencia y falta de respeto al universo creado porque las religiones han fallado en un grado importante, se ha querido matar a Dios y a la conciencia personal. Pero lo que está dentro del ser no puede morir.
No podemos adorar al potencial económico chino sólo porque nos mantiene en este tiempo de debilidad. Su competencia desleal en la manera de funcionar a nivel industrial nos está perjudicando. Pronto habrá que decirle, como lo hace su propia juventud, que debe adherirse al régimen de la democracia.