Cada partido que juega el Deportivo Alavés en Mendizorroza, que salvo raras excepciones son todos a los que asisto, además de las dudas sobre el juego me intriga la ikurriña que el capitán lleva en el brazalete, y me pregunto: si el Alavés es una sociedad anónima que no representa ni a Vitoria, ni menos a Álava, ni mucho menos al País Vasco, ¿por qué hace ostentación de la bandera de Euskadi, y no la de Álava o la de Vitoria? ¿No sería lo correcto que figurara en dicho brazalete el escudo o los colores del club que es a quién representa? ¿Cómo lo tolera la directiva, sabiendo que muchos de los socios no son vascos, que muchos de los jugadores tampoco lo son, y que el capitán que la porta puede que tampoco? ¿Por qué nos empeñamos en mezclar política y deporte? ¿Acaso así somos más euskaldunes? ¿Qué busca quién lleva a un recinto deportivo una bandera de España, una ikurriña o una señera? ¿Disfrutar de una competición deportiva o amparándose en el grupo, un enfrentamiento ideológico? ¿Por qué no la lleva cuando pasea solo o con la familia por la calle? ¿No es una manera de crear odios innecesarios? Luzcamos y disfrutemos de los colores de nuestros clubes y dejemos las banderas para cuando jueguen las selecciones. La de Euskadi, por ejemplo.