(En respuesta al artículo del presidente de Ikastolen Elkartea Koldo Tellitu, publicado en DNA el pasado día 13 de junio)
Han pasado algunos años desde que no coincidimos. A mí la vida me ha llevado a vivir a la Llanada alavesa. He tenido un hijo y cuando llegó la hora de su escolarización elegí Agurain, y como te podrás imaginar el modelo D.
Y lo hice en la Ikastola Pública Lope de Larrea, la única que entonces me daba la oportunidad de que mi hijo se educara íntegramente en euskera.
Más tarde me explicaron que este centro, en compañía de numerosos colectivos que trabajan a favor del euskera, llevaba más de 35 años euskaldunizando Agurain.
Descubrí un profesorado motivado, lleno de convicción y determinación en sacar adelante el proyecto educativo, un compromiso ejemplar de padres y madres y un proyecto abierto a la sociedad que le rodea. Sólo basta con preguntar para saberlo.
Centenares de familias y la tasa de matriculación así lo avalan.
He esperado a que pasara vuestra fiesta para escribirte pues mi interés no era polemizar y deslucir el día que con tanto esmero habéis preparado.
Se me escapa totalmente el porqué de las referencias a nuestra ikastola Lope de Larrea en tu colaboración enviada a los medios de comunicación los días previos al Araba Euskaraz. Me cuesta entender que para la promoción de un centro escolar haya que agitar miedos inventados o subrayar nuestra condición de centro público ( asociado a Sortzen-ikasbatuaz ) como si fuera algo malo.
La Ikastola Pública Lope de Larrea, durante toda su trayectoria, junto a otros colectivos como aek, Olbeak, Baietz Elkartea, Aniturri Institutoa, Bertso Eskola, 15 Ordu euskaraz ekimen, Berba Lagun ekimena? ha realizado y seguirá realizando un camino para la recuperación y normalización del euskera en la Llanada alavesa.
Así lo hemos decidido y estamos determinados a seguir haciéndolo. El camino es largo y duro; lo sabemos por experiencia y una nueva compañera de viaje no nos vendrá mal.
El domingo ya ha pasado, el lunes, enAgurain, también Araba Euskaraz.
