Como consecuencia del fallecimiento de nuestro estimado profesor de Religión, nos encontramos sin profesor/a de esta asignatura. Hasta el pasado 13 de abril recibíamos clase de una profesora de Religión que le había sustituido durante su enfermedad.
Hemos conocido ahora por la Dirección de nuestro centro que dicha profesora ha sido cesada y que el Departamento de Educación tiene la intención de que continuemos así hasta finalizar el curso, sin dicha profesora y por tanto sin clases en la asignatura de Religión.
Esta decisión atenta contra el derecho que tenemos a recibir clase de todas las asignaturas en las que estamos matriculados y durante todo el curso escolar. Nos sentimos perjudicados y agraviados, ya que a nuestros compañeros sí se les respeta este derecho.
Por lo tanto, los firmantes de esta carta, además de manifestar nuestra enérgica protesta, solicitamos que a la mayor brevedad posible podamos disponer de la profesora de Religión.