Me parece una gran injusticia la que se está cometiendo con el señor Garzón, un juez eminente y progresista, en su supuesta acusación de tres magistrados del Consejo del Poder Judicial por prevaricación. Este juez que ha llevado a los tribunales de la Audiencia Nacional casos de terrorismo, dictaduras, cohecho o influencias, memoria histórica, etcétera, no debe estar cuestionado en un país que se tilde de democrático y con una justicia justa.