- El ministro de Exteriores de Ucrania, Dmitro Kuleba, se presentó ayer a la reunión con los ministros de Exteriores de la OTAN con una agenda clara con tres puntos en ella: “armas, armas y armas”. “Mi agenda es muy simple, solo hay tres asuntos en ella: armas, armas y armas”, dijo a su llegada a la sede de la Alianza Atlántica. Kuleba aseguró que “en las recientes semanas, el ejército ucraniano y la nación ucraniana entera ha demostrado que sabemos cómo luchar, sabemos cómo ganar, pero sin el suministro sostenible y suficiente de las armas que ha pedido Ucrania, estas victorias irán acompañadas de enormes sacrificios”.

El jefe de la diplomacia ucraniana, de gira por Europa, manifestó que “la mejor manera de ayudar a Ucrania ahora es proveerle con todo lo necesario para contener a (el presidente ruso, Vladimir) Putin y derrotar al ejército ruso en Ucrania, de tal manera que la guerra no escale más”.

En concreto, dijo que Ucrania necesita, en particular, aviones, misiles antibuque, vehículos blindados personales y sistemas pesados de defensa aérea. “Creo que el trato que está ofreciendo Ucrania es justo: nos das armas, sacrificamos nuestras vidas y la guerra se contiene en Ucrania”, constató.

Kuleba consideró que no deben hacerse diferencias entre las armas defensivas y ofensivas “porque toda arma usada en el territorio de Ucrania por el ejército ucraniano contra un agresor extranjero es defensiva por definición”.

“Así que esta distinción entre ofensiva y defensiva no tiene ningún sentido cuando se trata de la situación en mi país. Aquellos países que dicen que vamos a proporcionar a Ucrania armas defensivas, pero no estamos en posición de darle armas ofensivas, son hipócritas. Es simplemente un enfoque injusto y no justificado”, afirmó.

Sobre Alemania, reconoció que ha dado “un paso revolucionario al cambiar su posición de no proporcionar armas en absoluto a permitir ciertos suministros y proporcionar a Ucrania, en particular, armas antitanque”. “Sin embargo, está claro que Alemania puede hacer más, dadas sus reservas y capacidad, y estamos trabajando con el Gobierno alemán para que nos proporcione armas adicionales”, comentó.

Sobre las sanciones contra Rusia, opinó que se ha dado un paso adelante y que hace solo una semana las medidas restrictivas propuestas eran mucho más débiles.

No obstante, insistió en imponer un embargo completo al gas y petróleo ruso, en expulsar a todos los bancos rusos del sistema internacional Swift y en cerrar todos los puertos a los barcos y bienes rusos con las mínimas excepciones posibles basadas en motivos humanitarios. “Francamente, espero que no volvamos a afrontar una situación de nuevo en la que para intensificar la presión de las sanciones necesitemos que se revelen atrocidades como la de Bucha y que impresionen e impacten a otros socios hasta el punto de que se sienten y digan que van a introducir nuevas sanciones”, dijo.

Por último, Kuleba llamó a que los ucranianos no tengan que pagar con “su vida, salud y sufrimiento” para que se apliquen nuevas sanciones contra Rusia.

Urgencia en el apoyo. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó ayer que reconocen la “urgencia” de proporcionar más apoyo a Ucrania para hacer frente a las tropas rusas, si bien también asumió que la Alianza debe evitar que el conflicto escale más allá de la antigua república soviética y admitió que la guerra puede durar “meses y, posiblemente, años”. Stoltenberg no quiso especificar el tipo de armas que los miembros de la OTAN están proporcionando a Ucrania.