Moscú - El Servicio Hidrometeorológico de Rusia (Rosguidromet) confirmó ayer que el breve aumento de la radiación tras la explosión de un misil con fuente de alimentación isotópica se debió a “gases inertes radiactivos”, producto de la desintegración de radionucleidos de estroncio, bario y lantano.
En un comunicado, Rosguidromet precisó que las muestras de aire recogidas en la ciudad de Séverodvink, situada junto al polígono donde el pasado día 8 se produjo el accidente, se hallaron radionucleidos de corta vida de estroncio, bario y lantano. Según la nota, el producto de la desintegración de estos radionucleidos son gases inertes radiactivos que fueron “la causa del aumento temporal de la potencia de la dosis ambiental de radiación gamma en 8 de agosto de 2019 en Severodvinsk”.
Por otro lado, el fracaso en las negociaciones para la prórroga del tratado START -el tratado de reducción de armamento estratégico ofensivo- tendría consecuencias fatales para la estabilidad mundial, según el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov. “Las consecuencias para la estabilidad estratégica serán fatales. Sin lugar a dudas, esto dañará la estabilidad estratégica a nivel global”, aseveró
Según Peskov, de fracasar la firma del nuevo tratado START la humanidad quedaría sin un solo acuerdo que regule este tipo de armas tras la retirada oficial de Estados Unidos y Rusia del tratado de eliminación de misiles y corto y medio alcance (INF) a principios de agosto. - Efe