Nueva York - El Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular fue ratificado ayer por 152 países en la Asamblea General de Naciones Unidas, en una votación en la que cinco países se han posicionado en contra, entre ellos Estados Unidos. Ante “el abrumador apoyo internacional” al pacto, como lo calificó el secretario general de la ONU, António Guterres, EEUU, Polonia, Hungría, Israel y la República Checa han mostrado su rechazo a un texto que había sido aprobado por aclamación el 10 de diciembre en Marrakech y que ha sido sometido a votación por petición de Washington.

Con esta votación, Estados Unidos quería dejar clara su desvinculación de lo acordado, por considerar que “impone o podría imponer directrices internacionales, normas, expectativas o compromisos que limiten nuestra capacidad de tomar decisiones en el interés superior de nuestra nación”. - Efe