Washington - Los fiscales que investigan la trama rusa en Estados Unidos detallaron ayer las mentiras que les contó Paul Manafort, el exjefe de campaña del ahora presidente Trump, tras alcanzar un acuerdo de colaboración con ellos. En un documento judicial, los fiscales que trabajan para Robert Mueller indicaron que Manafort contó “múltiples y perceptibles mentiras” en al menos cinco ámbitos de los interrogatorios.

Por un lado, los fiscales dijeron que Manafort les ocultó los contactos que mantenía con funcionarios de Trump. “Declaró que no mantenía comunicaciones directas ni indirectas con nadie del Gobierno mientras formaban parte del Gobierno y que nunca pidió a nadie que tratase de comunicar un mensaje a alguien del Gobierno sobre cualquier tema”, indicaron los fiscales.

De hecho, uno de los abogados del presidente y exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, ya reconoció la semana pasada que Manafort les había mantenido al corriente de las conversaciones que tuvo con los fiscales de Mueller.

En el escrito de hoy ante la magistrada del caso, Amy Berman Jackson, los fiscales también le acusaron de mentir sobre un pago de 125.000 dólares y sobre sus contactos con Konstantin Kilimnik, un ciudadano ruso con nexos con la inteligencia del Kremlin.

La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo tras conocer el documento que el caso “no dice absolutamente nada sobre el presidente y todavía menos sobre los nexos (con Rusia) y está dedicado casi por completo a cuestiones de cabildeo” de Manafort.

Manafort alcanzó un acuerdo de colaboración con Mueller por el que esperaba recibir una condena inferior a los 10 años de cárcel por unos delitos financieros de los que se declaró culpable. La semana pasada, sin embargo, los fiscales de Mueller dieron el pacto por roto por las supuestas mentiras de Manafort y dejaron la puerta abierta a imputarle nuevos cargos. - Efe