Las autoridades de Arabia Saudí ultimaron ayer los preparativos para la peregrinación anual a La Meca, rito que a partir del domingo llevarán a cabo cerca de dos millones de musulmanes llegados de todo el mundo a la ciudad más santa del islam. El Gobierno saudí dio ayer por concluidos todos los preparativos relativos a sanidad, seguridad, logística y servicios para la peregrinación, un rito también conocido como el Hach y que todo musulmán con capacidad financiera para costear el viaje debe realizar al menos una vez en la vida.

El Ministerio saudí de Interior afirmó en un comunicado que las fuerzas de seguridad han sido entrenadas para enfrentarse a “confrontaciones directas y violencia armada” y para detectar explosivos, drogas y armas. Esta semana, las fuerzas del orden saudíes llevaron a cabo una demostración de seguridad en La Meca, durante un desfile militar al que asistió el titular del Interior, Abdulaziz bin Saud bin Nayef, en el que simularon un enfrentamiento contra un grupo de terroristas que conducía un automóvil cargado de explosivos.

La Dirección de Defensa Civil informó de que sus equipos están preparados y entrenados para hacer frente a trece tipos de riesgos posibles, desde emergencias médicas, incendios o estampidas, que han causado muertes en el pasado, hasta situaciones tan poco probables en el desierto saudí como vientos huracanados e inundaciones. La estampida más grave ocurrida durante la peregrinación tuvo lugar en 2015, cuando murieron unos 2.000 fieles.

Para prevenir incendios, se ha reemplazado el 96% de las tiendas de campaña en las que duermen los peregrinos en la zona del monte Arafat por otras resistentes al fuego, según una nota del organismo. Por su parte, el Ministerio de Salud explicó que ha preparado más de 5.000 camas distribuidas entre 197 hospitales y centros sanitarios en La Meca y otros lugares sagrados, donde trabajan casi 30.000 médicos de distintas especialidades.

Desde que comenzaron a llegar los peregrinos, ya han sido operados 166 con dolencias cardiacas, incluidos diez a corazón abierto desde el pasado lunes. Una de las preocupaciones de las autoridades saudíes es el calor, pues en los próximos días están previstas temperaturas máximas de entre 42 y 44 grados en los lugares santos. Al menos quince egipcios han fallecido en los últimos días en Arabia Saudí por fatiga, por efecto del calor o por causas naturales, según datos del Ministerio de Salud de Egipto.

traslados Para trasladar a los peregrinos, las autoridades saudíes han preparado una flota de 18.000 autobuses equipados con un sistema electrónico que permite hacer un seguimiento de los mismos, de acuerdo con el Sindicato General de Vehículos. La Presidencia de la Santa Mezquita y la Mezquita del Profeta ha repartido a los ciegos un reloj inteligente que alerta a los peregrinos sobre los horarios de la oración, así como bastones blancos para el camino.

Entre los cerca de dos millones de peregrinos que se esperan en la ciudad santa, figuran 1.684.629 extranjeros, que ya han llegado a territorio saudí, precisaron ayer las autoridades de inmigración. La peregrinación tendrá lugar entre este domingo y el próximo viernes y, como cada año, coincide en sus últimos días con la Fiesta del Sacrificio, la principal festividad musulmana en la que los fieles sacrifican corderos o reses. - Efe