Bruselas - La UE y la ONU instaron ayer al cese de las hostilidades en Siria, como única vía posible para lograr una solución política y humanitaria, que pasa también por un compromiso financiero de ayuda para asistir a los ciudadanos sirios y las comunidades de acogida de refugiados. Ese es el objetivo de la conferencia internacional de donantes que concluye hoy en Bruselas y se celebra por segundo año consecutivo, en favor de un país con 13,1 millones de personas que necesitan asistencia humanitaria, 5,6 millones de refugiados en países vecinos y 3,9 millones de personas vulnerables en las comunidades de acogida, según datos de la ONU.

Pese a las donaciones anunciadas por los donantes en 2017, solo 2.300 millones de dólares de los 9.100 “necesarios” para la región han sido desbloqueados, durante 2018 ha empeorado, con 700.000 desplazados ante la violencia o extrema necesidad desde el principio del año. “Cerca de un 70% de la población vive ahora en extrema pobreza”, afirmó el Coordinador de Emergencias, Mark Lowcock, quien esperó mostrar a los sirios “que no están olvidados, buscando soluciones para ayudarlos en esta situación terrible”, señalan desde la ONU.

Contribuciones La UE y la ONU esperan superar en esta conferencia el compromiso de 5.630 millones de euros alcanzado en 2017, cuando los donantes ya propusieron una cantidad adicional de 3.700 millones de dólares (3.500 millones de euros) para 2018-2020. Las contribuciones van principalmente destinadas a Siria y a los principales países de acogida de refugiados: Turquía, Líbano, Jordania, Irak y Egipto. “De todas las emergencias humanitarias a las que nos enfrentamos hoy, ninguna es como la de Siria en términos de escala o alcance de la necesidad”, afirmó el Alto Comisario de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi. - Efe