Berlín - La canciller alemana, Angela Merkel, admitió ayer que en la última jornada de negociaciones con el Partido Socialdemócrata (SPD) para acordar un pacto de gobierno se necesitarán “compromisos dolorosos” por ambas partes y se mostró dispuesta a ellos si son en beneficio del país. En declaraciones a los medios antes de comenzar las reuniones en la sede de su partido en Berlín, Merkel consideró importante que los equipos negociadores no se pierdan en “cuestiones pequeñas y de detalles”, ya que se trata de conseguir un acuerdo “por el bien del país”.

Más de cuatro meses después de las elecciones, la canciller estimó que, en tiempos convulsos, se espera de los grandes partidos que ofrezcan “confianza” y que pongan todo de su parte para garantizar un futuro seguro a los ciudadanos y a la economía alemana. “Todos deberemos hacer todavía compromisos dolorosos, estoy dispuesta si podemos garantizar que las ventajas predominan sobre los desventajas”, afirmó la canciller.

El líder socialdemócrata, Martin Schulz, había llegado poco antes a la central de la Unión Cristianodemócrata (CDU) y se mostró confiado de poder alcanzar un acuerdo, que se negocia ya en tiempo de descuento porque el calendario inicial preveía cerrar el pacto el domingo.

“Tengo buenos motivos para suponer que llegaremos a un final, espero que con un espíritu positivo y con un buen resultado para nuestro país”, dijo Schulz.

Su objetivo es consensuar “resultados buenos, constructivos, sólidos y compartidos” en un día que calificó de “decisivo” y en el que se comprobará si ambas partes son capaces de cerrar un pacto para un “gobierno estable” y “duradero”, capaz de enfrentar los desafíos nacionales e internacionales. Los asuntos en los que ayer se atascaron las negociaciones, como confirmó, son las reivindicaciones socialdemócratas para poner fin a los contratos laborales temporales injustificados y para garantizar la igualdad de trato en la asistencia en los seguros públicos y privados.

consulta a los militantes El documento consensuado deberá todavía ser refrendado por los militantes socialdemócratas en una consulta vinculante, en la que podrán participar los alrededor de 440.000 afiliados. Según informó ayer el diario Rheinische Post, se han presentado al menos cinco demandas ante el Tribunal Constitucional contra esa consulta, pero hace cuatro años, cuando el SPD sometió también al voto de sus afiliados el acuerdo de gran coalición con Merkel, ese órgano decidió que el procedimiento era legítimo y no vulneraba la capacidad de decisión de los diputados.

El líder socialdemócrata rechazó que todavía existan “grandes problemas” en materia de política exterior, cuestión que dijo se iba a abordar en primer lugar, y se mostró convencido de que también en este asunto se alcanzará un consenso. Si se da luz verde al pacto de gran coalición, Merkel podrá iniciar su cuarta legislatura como canciller, tres de ellas en alianza con los socialdemócratas y una con los liberales.

Ganó las elecciones de septiembre con amplio margen, pero con una importante pérdida de votos, y fracasó en un primer intento de coaligarse con los liberales y los verdes, lo que obligó a Schulz a abrirse a un diálogo que había rechazado tras la debacle electoral de los socialdemócratas en las urnas. - Efe