Londres - El euroescéptico y ex líder del UKIP, Nigel Farage, anunció ayer por sorpresa que apoyaría la celebración de un segundo referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea con el que se “terminaría con los lamentos” de los detractores del Brexit. “Quizá, solo quizá, estoy llegando al punto de pensar que deberíamos tener un segundo referendo”, reconocía. Además, se mostró convencido de que Nick Clegg y Tony Blair nunca van a dejar de pedir un segundo referéndum, por lo que esta es la única forma de zanjar el tema.

Para el británico con esta decisión, no solo volverían a ganar los partidarios del Brexit, si no que además se cerraría el debate durante una generación. En su opinión, el porcentaje que votaría irse sería mucho más grande que en 2016, cuando un 52% votó a favor de la salida del bloque común. Pero lo cierto es que las encuestas señalan que de celebrarse una nueva consulta la permanencia ganaría hasta por 10 puntos de ventaja.

La intervención por sorpresa de Farage fue bien recibida por los partidarios de seguir en la UE, pero un portavoz de May descartó la idea, afirmando que un segundo referendo supondría una traición a los votantes y derivaría en un mal acuerdo con Bruselas. - R. Álvarez