Buenos Aires - La jueza argentina que investiga la desaparición del submarino ARA San Juan declaró ayer que podría estar en medio de una “misión de carácter confidencial” cuando se le perdió la pista el miércoles de la semana pasada.
Tras afirmar hace dos días que lo que hacía el submarino en el momento de la desaparición era “secreto de Estado”, matizó sus palabras diciendo que “eso sonó muy feo”, ya que a lo que se refería es que, al tratarse de la Armada, que tiene el deber de resguardar la seguridad del mar territorial argentino, “puede haber una misión de carácter confidencial”.
En una entrevista en la radio local La Red, Marta Yáñez, la titular del juzgado federal de Caleta Olivia, en la provincia de Chubut (Patagonia), justificó esa teoría con que no se está hablando “de un particular que estaba pescando, o un chino que está pescando dentro del área exclusiva del mar territorial argentino”.
Preguntada acerca de si la explosión detectada en el submarino podría corresponder a un ataque, una hipótesis que ya rechazó la Armada argentina, la jueza sostuvo que “no descarta nada” porque está comenzando la investigación y se trata de “un submarino que puede estar en la zona de culminación de la plataforma continental (la zona marítima que legalmente le pertenece al país)”.
Tras declarar que “podría haber estado controlando que no hubiera pesca ilegal”, aunque esto “no le consta”, la jueza quiso zanjar el tema diciendo que ya “está pedido” conocer la actividad que realizaba el sumergible cuando desapareció.
Sí pudo asegurar, en cambio, que cuando emitió sus últimas señales el submarino se encontraba en aguas jurisdiccionales argentinas.
Otro de los puntos que tendrá que investigar la instructora es el de las condiciones en las que inició su misión el San Juan, que según explicó Yáñez, “tienen que ser informadas por la Armada”. “Yo no quiero dejar de ser lógica, y creo que la Armada es la ultima interesada en que salga un submarino a navegar que no esté en condiciones; creería de buena fe. Yo no puedo pensar en fantasmas, en mentiras, en engaños y en escondites”, prosiguió.
Por último, acerca de su orden de ser provista con las novedades del operativo de búsqueda, la jueza explicó: “No pretendo que cada tres horas me digan ‘no hay nada’, sino que inmediatamente que registren algo, me hagan una comunicación de todo lo que encuentren en el lugar, aprovechando la tecnología con la que contamos”.
“No fue hundido por otra nave” Por su parte, la Armada, que remarcó que “no hay ningún indicio” de que la nave fuera víctima de un ataque contestó a la jueza que el submarino no estaba realizando “una misión ni secreta ni especial”, sino ejerciendo el “control de soberanía” cuando desapareció en el Atlántico hace nueve días. “El submarino se encontraba navegando en tránsito de Ushuaia (en la zona más austral del país) a Mar del Plata (provincia de Buenos Aires) en una ruta directa en la zona económica exclusiva, cerca del límite, ejerciendo el control de soberanía que hace cualquier unidad de la Armada”, dijo el capitán de navío Enrique Balbi. El portavoz militar realizó estas declaraciones al divulgar ante la prensa en la sede central de la fuerza en Buenos Aires el último informe oficial del día, durante el que fue consultado por una supuesta misión secreta del submarino y la posibilidad de haber sido hundido por un país extranjero. “No estaba en una misión ni secreta ni especial, sino ejerciendo control de soberanía”, señaló. - Efe