Londres - La ministra del Interior británica, Amber Rudd, anunció ayer que prevé iniciar el registro de los ciudadanos de la Unión Europea que residen en el Reino Unido a finales del próximo año. El Gobierno británico contratará a 1.200 nuevos trabajadores antes de abril para hacer funcionar ese registro, que según Rudd será distinto al actual proceso de petición de residencia permanente en el Reino Unido, cuya complejidad burocrática ha motivado críticas.
Será “un sistema completamente distinto del tipo de sistemas a los que la gente está acostumbrada”, indicó la titular del Interior.
Rudd aseguró que la “posición por defecto” que adoptará el Gobierno al recibir las peticiones de registro por parte de los cerca de tres millones de comunitarios en el Reino Unido será la de “aceptación”. “Con su permiso, podremos acceder a la información de Hacienda y del Ministerio de Trabajo y Pensiones para hacer que el proceso sea muy sencillo y directo”, afirmó la ministra.
“Serán aceptados si no hay problemas de fraude o de criminalidad. Así que, aunque estamos reclutando personal adicional, esperamos que la gran mayoría de las personas que se registren lo hagan a través de Internet de una forma muy sencilla”, agregó.
El secretario permanente del Ministerio del Interior, Philip Rutnam, desveló por su parte que se ha comenzado a contratar a 300 agentes adicionales para engrosar la fuerza fronteriza del Reino Unido, como parte de los planes de cara al Brexit. La ruptura de lazos definitiva entre el Reino Unido y la UE se producirá previsiblemente el 29 de marzo de 2019, cuando expire el plazo de dos años desde que invocó el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que inicia el proceso de salida. - Efe