londres - A plena luz del día y en hora punta, Londres sufrió un nuevo ataque terrorista. Se trató de un “artefacto explosivo improvisado” que fue detonado en un vagón lleno del metro a su paso por la estación de Parsons Green, en el suroeste de la capital británica, dejando 29 heridos. Scotland Yard confirmó a los pocos minutos que trataba la explosión como un ataque terrorista.
La Policía recibió una llamada a las 8:20 hora local y en apenas cinco minutos se acercaron a la plataforma de la citada estación de metro efectivos del cuerpo sanitario, bomberos y policia. En total, se evacuaron a 253 personas de la estación de metro y a vecinos de un radio de 50 metros alrededor de la estación. La línea de metro District, entre las estaciones de Earl’s Court y Wimbledon permanece cerrada mientras continúa abierta la investigación.
Por el momento, el equipo de investigación formado por un centenar de detectives y de personal del M15 se centra en encontrar a la persona que colocó el dispositivo. La cadena de televisión Sky News informó de que las autoridades buscaban a un sospechoso, pero no hubo confirmación oficial de este supuesto ni de otras detenciones.
Según las imágenes aparecidas en redes sociales, el dispositivo estaba colocado en un cubo blanco dentro de una bolsa de la cadena de supermercados alemana Lydl y con varias luces navideñas saliendo por uno de los extremos. La policía cree que el fuego fue causado por la detonación del dispositivo, pero los expertos creen que hubo un fallo y explotó el detonador sin que la deflagración llegara a la carga explosiva.
La primera ministra británica, Theresa May condenó el ataque terrorista como “cobarde” y reconoció como se trató de “un dispositivo destinado a causar daños importantes”. Además, May presidió una reunión de emergencia del comité Cobra para analizar el suceso y confirmó que la alerta antiterrorista en Reino Unido sigue en grave, pues la policía no cree que haya terroristas capaces de atentar de inmediato. Pero sí anunció el aumento de la presencia policial armada en la red de transporte de Londres.
La polémica del día llegó desde Estados Unidos, donde su presidente escribió en Twitter que los terroristas “son personas enfermas” y apuntó a que las autoridades británicas ya tenían bajo vigilancia al responsable del ataque, unos comentarios que Scotland Yard calificó de “poco útiles” y de “pura especulación”. Unas palabras que precisamente volvió a repetir May: “Como he dicho, la Policía y los servicios de seguridad están trabajando para averiguar todas las circunstancias de este cobarde ataque e identificar a los responsables”.
Heridos La mayoría de los heridos fueron tratados por quemaduras en cuatro hospitales de la ciudad y ocho de ellos fueron dados de alta a última hora de la tarde. Testigos del incidente describieron haber visto a un pasajero con heridas en la cara, mientras que otros hablaron de “pánico” cuando los pasajeros salieron corriendo del vagón tras la explosión.
Anna Gorniak, quien estaba en el vagón en el que se produjo la explosión, describió como vio “una bola de fuego” viniendo hacia su camino. En ese momento empezó a correr y por su mente llegó a pensar que no iba a sobrevivir. A pocos metros se encontraba el pasajero Peter Crowley viajando desde Wimbledon. Con varias quemaduras en su cabeza como resultado de la explosión, aseguró en una entrevista radiofónica que había “mucha gente peor que yo”.
Por su parte, Emma Stevie, de 27 años, se vio atrapada en una “estampida humana” al intentar huir del vagón atacado y se vio atrapada en los escalones de la estación mientras la gente se apresuraba a alejarse del tren por miedo a más explosiones. “Me acerqué junto a una barandilla y me puse en la posición fetal”, puntualizó.
Mientras, Sylvain Pennec, un desarrollador de software de Southfields, al suroeste de Londres, dijo que estaba a unos 10 metros del vagón donde ocurrió la explosión. “Oí un boom, y cuando miré, había llamas por todas partes”. A su salida se quedó observando el dispositivo para ver más de cerca lo que creía que era el origen de la explosión: “Parecía un enorme cubo de mayonesa, no estoy seguro si fue una reacción química o algo más, pero parecía algo hecho en casa”.
medidas adicionales El Chelsea, cuyo estadio se encuentra en las inmediaciones de la estación de metro afectada, anunció medidas de seguridad adicionales de cara al partido contra el Arsenal del domingo. Por lo pronto, el estadio permanecerá cerrado hasta el domingo por la mañana y no habrá visitas al estadio ni al museo o la tienda. De cara al partido, piden a los fans que lleguen al menos una hora antes del pitido inicial para pasar las medidas de seguridad adicionales y que no lleven mochilas que retrasen su entrada al estadio.
En es el quinto ataque terrorista en lo que va 2017, es el único del año en el que nadie ha muerto. Las cuatro anteriores sumaron un total de 36 personas muertas. Esto hace que Inglaterra esté ante el período de más actividad terrorista desde la campaña de bombardeos del IRA a principios de los años 70.