WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habría decidido poner fin al programa que da acceso a permisos de trabajo a quienes ingresaron al país de forma irregular siendo niños, dando al Congreso seis meses de plazo para acordar una legislación alternativa, según han informado este domingo fuentes conocedoras del asunto.

Trump decidió retrasar la entrada en vigor de su decisión de poner fin al programa Consideración de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por su sigla en inglés), que protege a cerca de 800.000 jóvenes de la deportación, para dar tiempo a los congresistas a impulsar una ley que lo reemplace.

El programa también autoriza a pedir permisos de trabajo a los beneficiarios, conocidos como 'Dreamers' en el país norteamericano.

La decisión, que será anunciada el martes, busca aplacar a las dos partes en el debate migratorio en un momento en el que Trump también debe lidiar con el programa nuclear de Corea del Norte y la recuperación de Houston tras el paso del huracán 'Harvey'.

Trump prometió durante su campaña electoral dejar sin efecto el programa de inmediato, pero una vez en la Casa Blanca encontró una férrea oposición que incluye a miembros del Partido Republicano.

El líder de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, instó el viernes a Trump a no derogar el programa creado bajo el mandato de su predecesor, Barack Obama.

Durante la campaña, el candidato convirtió a la inmigración irregular en un tópico central de su discurso y, desde que asumió el poder en enero, la cantidad de deportaciones aumentó con fuerza.

Sin embargo, los empresarios dicen que los inmigrantes hacen una contribución económica importante y destacan que poner fin al programa impactaría en el crecimiento económico del país.