Londres - El Brexit ha empezado a tener un impacto en la inmigración en el Reino Unido, que se ha situado en su nivel más bajo en tres años por el fuerte aumento en la marcha de ciudadanos comunitarios desde el referéndum del año pasado sobre la permanencia o no en la Unión Europea (UE), según datos divulgados ayer.
En un comunicado, la Oficina Nacional británica de Estadísticas (ONS) revela que la inmigración neta hacia el Reino Unido disminuyó en 81.000 personas en los últimos 12 meses, hasta finales de marzo, para situarse en 246.000. De esa cifra de inmigración neta, 127.000 corresponde a ciudadanos comunitarios, lo que supone una bajada de 51.000 frente al periodo anterior.
Este dato, que tiene en cuenta la diferencia entre las llegadas y salidas del país, se vio claramente influida por la perspectiva del Brexit o desconexión del bloque comunitario, prevista para marzo de 2019. Por otra parte, la ONS detectó un aumento en 33.000 personas de los ciudadanos de países de la UE que abandonaron el Reino Unido, hasta situar el dato general en 122.000 durante ese periodo, el más elevado en casi una década.
En concreto, dentro de este grupo resaltó el incremento notable, de 17.000 personas, en las salidas de ciudadanos originarios de países que se unieron al bloque comunitario en 2004: República Checa, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Eslovaquia y Eslovenia.
Tras la difusión de esos datos, el secretario de Estado británico para la Migración, Brandon Lewis, consideró “bueno” que la inmigración esté “bajando” frente a la inquietud planteada por grupos empresariales ante esa caída. En este sentido, un portavoz de la patronal británica CBI apuntó ayer en un comunicado publicado por medios locales que “la pérdida de estas habilidades vitales deberían preocuparnos a todos”.
Por su parte, Nicola White, responsable del departamento de estadísticas migratorias de la ONS, destacó la “caída en la migración neta”, motivada por un aumento de la emigración, principalmente de ciudadanos comunitarios, y en particular de los ocho países citados, así como por un “descenso de la inmigración” de todos los grupos. Según esta responsable, el mapa migratorio en el país empieza a recibir el impacto del histórico referéndum sobre la UE, celebrado el 23 de junio de 2016 y con victoria del Brexit, que “podría estar influyendo en las decisiones de la gente de migrar dentro y fuera del Reino Unido”. Sin embargo, la ONS considera que “aún es pronto para saber si se trata de una tendencia a largo plazo”.
Al tiempo que se conocieron los datos de inmigración, la ministra británica de Interior, Amber Rudd, puso en marcha una investigación para esclarecer qué papel desempeñan los estudiantes extranjeros en la economía del Reino Unido. Con relación al periodo que abarca hasta el pasado marzo, el 97% de estudiantes procedentes de países de fuera del bloque que entraron al país con un visado ya se han marchado, según reveló la ONS en su nota.
protección de datos El Gobierno británico instará a la UE a establecer un marco que garantice que ambas partes seguirán protegiendo y compartiendo datos personales tras el Brexit de manera “segura, adecuada y regulada”, según detalló ayer.
El Ejecutivo de Londres lleva varios días difundiendo documentos oficiales en los que desgrana su postura ante asuntos cruciales de su futura marcha del bloque comunitario, a cuatro días para el inicio de la próxima ronda de conversaciones con Bruselas. En el texto publicado ayer por el Ministerio para la salida del Reino Unido de la UE, Londres revela que tratará de llegar a un acuerdo temprano con Bruselas a fin de asegurar que los datos personales continúan compartiéndose entre ambas partes en el futuro “de manera segura, adecuada y regulada”. - Efe