Caracas - Aunque la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) de Venezuela tomó el miércoles el salón elíptico del Palacio Federal Legislativo, sede del Parlamento controlado por la oposición al Gobierno, como paso previo a la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), prevista para ayer, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció a última hora que esta se constituirá hoy debido a que se debe esperar la proclamación de algunos ganadores que no han sido adjudicados por el Poder Electoral. Como consecuencia, la oposición venezolana también aplazó la movilización ciudadana que había convocado a hoy.
Para que “se organice bien, en paz, con tranquilidad y todo el protocolo necesario el próximo viernes -hoy-, a las 11 de la mañana para permitir la proclamación de 35 constituyentes que deben proclamar entre hoy y mañana -por ayer y hoy-”, explicó el mandatario durante un acto oficial con los constituyentes en Caracas. Además, Maduro afirmó que esto permitirá que se despejen “amenazas” que, afirmó, pesan sobre la instalación de esta junta, prevista en el Palacio Federal Legislativo, sede del Parlamento de contundente mayoría opositora.
Pese a que durante la campaña se afirmó que esta ANC se instalaría en el palacio legislativo, Maduro indicó que esos son “temas” que se encuentran en “debate”, aunque infirió que “seguramente” esta propuesta será aprobada. Aun así, durante la noche de este miércoles la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) tomó un salón del Parlamento venezolano, de mayoría opositora, como parte de los preparativos de seguridad ante la instalación de la ANC.
Como respuesta, la oposición venezolana aplazó también a hoy la movilización ciudadana que había convocado para ayer contra la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente, que se eligió el domingo entre fuertes protestas y amplio rechazo internacional. Los 545 integrantes de la Constituyente deben tomar posesión hoy en la misma sede del poder legislativo en la que opera el Parlamento, que no reconoce a esta asamblea impulsada por el oficialismo para reordenar el Estado y fortalecer de esta forma la revolución chavista.
La esposa de Maduro y miembro de la Constituyente, la primera combatiente Cilia Flores, y otras figuras destacadas del oficialismo pidieron al “pueblo” que acompañe a los integrantes de esta asamblea a su toma de posesión al Palacio. Esto podría provocar que coincidan las movilizaciones del chavismo gobernante y de la oposición, que también ha pedido a sus seguidores que se vayan a la sede legislativa.
oposición La oposición venezolana y amplios sectores sociales rechazan la Constituyente por no haber sido sometida a un referendo previo de aprobación, y ven como un intento de “consolidar la dictadura” este proyecto activado por el presidente para cambiar la Carta Magna. El propio Maduro y otros dirigentes del oficialismo han adelantado que la Constituyente trabajará para eliminar la inmunidad parlamentaria de los diputados e intervendrá y tomará el control de la Fiscalía, cuya titular, Luisa Ortega Díaz, ha alertado de los que considera tintes totalitarios de este plan para cambiar el ordenamiento jurídico.
Maduro ha anunciado también medidas severas contra las “mentiras” de las televisiones privadas, y ha prometido la instauración a través de la Constituyente de una “comisión de la verdad” que haga pagar a los líderes opositores por la violencia en que han desembocado algunas de la marchas que han convocado.
Países como Estados Unidos, España, Colombia, México o la Unión Europea (UE) no reconocerán esa asamblea, y la UE podría seguir los pasos de Washington y castigar a la cúpula chavista con sanciones individuales por llevarla adelante. Otros como China, Rusia, Cuba, Bolivia o Nicaragua, sin embargo, han reconocido la asamblea elegida el domingo entre candidatos íntegramente oficialistas y denuncias de fraude en la cifra de participación. Ante esta crisis en asuntos de exteriores, Maduro nombró ayer como nuevo ministro de Relaciones Exteriores a Jorge Arreaza, en sustitución de Samuel Moncada. - Efe