París - La primera mujer que fue elegida presidenta del Parlamento Europeo en 1979, Simone Veil, considerada una figura del feminismo tras legalizar el aborto en Francia en 1974 como ministra de Sanidad, murió ayer a los 89 años, anunció su familia. Veil, superviviente como adolescente judía al campo de exterminio nazi de Auschwitz, falleció en su domicilio de París. Había nacido en Niza en 1927 en una familia de judíos no practicantes y fue detenida por la Gestapo en 1944 con buena parte de sus familiares, algunos de los cuales (sus padres y un hermano) no sobrevivieron al arresto.
A su vuelta a Francia, tuvo una formación jurídica y trabajó como alta funcionaria en la magistratura hasta que en mayo de 1974 el recién elegido presidente, Valéry Giscard d’Estaing, la nombró ministra de Sanidad, un cargo en el que se significó sobre todo por la conocida como ley Veil, que despenalizó la interrupción voluntaria del embarazo.
En la defensa de esa ley ante el Parlamento, se enfrentó a una oposición particularmente dura de la derecha, con algunos diputados que le llegaron a reprochar que apostaba por el genocidio y por un comportamiento similar al de los nazis.
En 1979, marcará un nuevo hito en el avance de las mujeres al convertirse en la primera presidenta del Parlamento Europeo, elegida además por primera vez mediante sufragio universal.
Firme defensora de la causa europeísta -y distinguida por ello con el Premio Príncipe de Asturias de la Cooperación Internacional en 2005-, permanece en la Eurocámara hasta 1993, cuando el primer ministro Édouard Balladour la recupera para el Gobierno como ministra de Asuntos Sociales y Sanidad.
Tras su salida del Ejecutivo, Veil pasa a ser miembro del Consejo Constitucional desde 1998 a 2007, año en que, fuera ya del órgano judicial, defiende con fervor la candidatura presidencial de su amigo Nicolas Sarkozy.
La memoria de la ‘Shoah’ En paralelo, preside la Fundación para la Memoria de la Shoah, desde donde mantiene vivo el recuerdo del Holocausto. Veil es reconocida también en el mundo de las letras, sobre todo tras su obra autobiográfica Una vida, que le abre las puertas de la prestigiosa Academia Francesa, donde se convierte en una inmortal (como se llama a los académicos) en 2010.
Volvió a un puesto ministerial como titular de Sanidad y Asuntos Sociales en el Gobierno del primer ministro Edouard Balladur entre 1993 y 1995, fue miembro del Consejo Constitucional entre 1998 y 2007, y entró a formar parte de la Academia francesa en 2008.
En una de las primeras reacciones, el presidente francés, Emmanuel Macron, en un mensaje en su cuenta de Twitter, envió su pésame a la familia y dijo esperar que Simon Veil “pueda con su ejemplo inspirar a nuestros compatriotas, que encontrarán lo mejor de Francia”.
Las instituciones de la UE expresaron ayer sus condolencias por el fallecimiento de Simone Veil, la primera mujer presidenta del Parlamento Europeo (PE) y una destacada figura del feminismo por lograr despenalizar el aborto en Francia en 1974. El presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, se refirió a Veil como “una luchadora infatigable de las causas más nobles” que vivió “en su carne” las desavenencias europeas y “ayudó a construir un continente de paz”.
El presidente de la Eurocámra, Antonio Tajani, recordó a la política francesa como “la conciencia de la UE, figura de la lucha contra el antisemitismo y defensora de los derechos de las mujeres”. Tajani sostuvo que la presidencia de Veil del Parlamento Europeo tuvo “un impacto duradero en la historia de la institución” y recordó su compromiso con los valores éticos, democráticos y europeos. “Es nuestro deber continuar cultivando su ejemplo inspirador”, dijo el político italiano. El portavoz de la Eurocámara, Jaume Duch, anunció que el pleno de la institución, que se celebrará la próxima semana en Estrasburgo guardará un minuto de silencio en su homenaje. - Efe
