Moscú - El líder opositor ruso Alexéi Navalni fue condenado ayer a quince días de arresto tras organizar el domingo las mayores protestas antigubernamentales desde el retorno de Vladimir Putin al Kremlin en 2012. “No admito mi culpabilidad. La gente está descontenta con la corrupción y por eso decidió participar en una manifestación pacífica”, aseguró el opositor durante la vista en un tribunal de Moscú. Decenas de miles de rusos respondieron el domingo en más de 80 ciudades del país a la llamada de Navalni a participar en una jornada de protestas contra la corrupción en la administración pública, con el punto de mira en el primer ministro, Dmitri Medvedev, al que el opositor acusa de enriquecerse con el cargo.
En el centro de Moscú la protesta, que no fue autorizada por el Ayuntamiento, se saldó con Navalni y varios centenares de manifestantes detenidos, entre ellos muchos estudiantes de secundaria y universitarios. “Ante la exigencia de los agentes de policía de que cesara sus acciones, (Navalni) trató de resistirse, empleando brazos y piernas, e intentando montar alboroto”, dictaminó ayer el juez del tribunal Tverskoi, que condenó al opositor por desacato a la policía. También fue sancionado por la Justicia con una multa de 20.000 rublos (unos 300 euros) por instigar a la gente a salir a la calle, lo que, según el fallo, habría obstruido el tráfico y causado desórdenes públicos. “Yo siempre cumplo las exigencias legales de la policía”, replicó el opositor, que fue detenido el domingo a la salida del metro antes incluso de que se iniciara el acto.
sin alternativa Navalni destacó que durante los tres días anteriores a la protesta del domingo, el Ayuntamiento no ofreció ningún lugar alternativo en la ciudad para celebrar la manifestación contra la corrupción, por lo que según él la oposición no violó en ningún caso la ley. El opositor ya fue privado en febrero de la posibilidad de presentar su candidatura a las elecciones presidenciales de 2018, en las que previsiblemente Putin buscará su reelección, tras ser considerado culpable de estafa, aunque él ha recurrido el fallo.
Navalni, considerado el opositor con mayor tirón electoral y que ya inició su campaña a finales de 2016, fue uno de los organizadores en 2011 y 2012 de las mayores protestas contra el Kremlin desde la caída de la Unión Soviética al grito de “Rusia sin Putin”. El Kremlin defendió ayer el uso de la fuerza por parte de la policía rusa a la hora de dispersar a los manifestantes en Moscú, que tanto la oposición, los medios liberales como las cancillerías occidentales consideraron excesiva. - Efe