Washington - La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, intentó ayer romper el hielo con el nuevo secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, en el marco de una visita de dos días a Washington para discutir las áreas en las que podrán cooperar la UE y la Administración de Donald Trump, unas relaciones tormentosas desde la llegada del magnate a la Casa Blanca y que llevó a decir al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, que Estados Unidos es una amenaza para el futuro de Europa.

El objetivo de la visita, que concluirá hoy, fue “reafirmar los lazos de una asociación histórica entre la UE y EEUU” y ambos dirigentes acordaron continuar con “la cooperación transatlántica en asuntos de seguridad, incluida la lucha antiterrorista, los ciberataques y el reto global de las migraciones”.

Mogherini se verá hoy con el asesor de la Casa Blanca y yerno de Trump Jared Kushner, así como con T. Flynn, aunque no está previsto que se vea a solas con Donald Trump. La alta representante para la UE también mantendrá encuentros con diversos senadores como el presidente de la Comisión de Asuntos Exsteriores, Bob Corker, o el de Servicios de Armamento, John McCain, y el de Seguridad Nacional y Asuntos de Gobierno de relaciones con Europa, Ron Johnson.

Por su parte, el comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramopoulos, sostuvo ayer una “fructífera y amistosa primera conversación” con el secretario de Seguridad Nacional de EEUU, John Kelly. “Tras esta fructífera y amistosa primera discusión, deseo continuar trabajando estrechamente con el nuevo gobierno para encarar los retos globales juntos, y mantener y profundizar los históricos lazos de amistad entre EEUU y la UE”, señaló Avramopoulos en un comunicado.

“Esta alianza nos hace más fuertes y responde a las preocupaciones de nuestros ciudadanos”, agregó el comisario europeo.

Por su parte, el secretario estadounidense expresó en una nota que la relación de seguridad entre EEUU y la UE está centrada en “la protección frente a la doble amenaza del terrorismo y la migración irregular”, y renovó su “compromiso para ayudar a fortalecer sus capacidades”.

Se trata de las primeras reuniones de alto nivel entre la UE y EEUU desde que el presidente Trump tomó posesión de su cargo el pasado 20 de enero. Los 28 países del bloque europeo expresaron a comienzos de mes en una cumbre informal en Malta su “preocupación” por algunas decisiones y actitudes del Gobierno de Trump, pero aseguraron que no hay “sentimiento antiamericano” en la UE, en palabras del primer ministro maltés, Joseph Muscat, cuyo país preside la UE este semestre. - Efe