seúl - Por cuarto fin de semana consecutivo, los surcoreanos volvieron a salir ayer de manera masiva a la calles de todo el país para pedir la dimisión de su presidenta, Park Geun-hye, acosada por un gran escándalo de corrupción. Un sábado más, el clamor popular se hizo evidente y los carteles rojos y letras blancas con el mensaje Park Geun-hye dimisión inundaron las nuevas protestas convocadas por los partidos de la oposición y más de mil organizaciones civiles. Las movilizaciones coincidieron con el anuncio ayer de la Fiscalía de que en las próximas horas presentará cargos contra Choi Soon-sil, la amiga íntima de la presidenta en el centro de la polémica por supuestamente haberse enriquecido gracias a su relación con la mandataria. - Efe