Miami - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, subrayó que los votantes del país todavía están a tiempo de “mover la historia en la dirección correcta” en las elecciones de 8 de noviembre con su voto por la demócrata Hillary Clinton. “Hillary nos llevará hacia adelante si le damos la oportunidad”, dijo Obama en la sede en Miami de la Florida International University (FIU), abarrotada de jóvenes que le interrumpieron con ovaciones y gritos de júbilo en numerosas ocasiones. En un escenario dominado por la frase I’m with Her (Estoy con ella), Obama se esforzó en convertir su popularidad en entusiasmo por estas elecciones y por Clinton, de quien dijo que le ha hecho “mejor presidente” y a quien presentó como quien puede continuar su trabajo.

“Tenemos trabajo que hacer para finalizar lo que empezamos hace ocho años”, dijo Obama, quien se mostró seductor y bromista con su audiencia, pero a la vez no perdió la oportunidad de señalar que hay tiempo todavía para hacer la elección correcta. En este momento, a cinco días de unas elecciones muy reñidas, un votante tiene el poder de “cambiar las cosas para mejor o para peor”, dijo. Obama instó a los jóvenes a votar y a hacerlo de manera anticipada o por correo. Hasta les dijo de memoria la dirección del centro comercial cercano a la sede de FIU donde se puede votar anticipadamente, lo que provocó risas entre los asistentes a este acto de campaña, el primero de los dos que Obama celebró ayer en Florida, un estado decisivo en estas elecciones.

El segundo fue en Jacksonville, en el noreste del estado, donde también el candidato republicano, Donald Trump, tenía ayer un acto de campaña. Obama alternó los elogios a Clinton, que fue su rival en las primarias demócratas en 2012 y luego su secretaria de Estado, con los comentarios negativos acerca de Trump, cuya sola mención provocaba los abucheos del público.

Además de afirmar que el millonario republicano está “singularmente descalificado” para ser presidente y por su temperamento no debe ser comandante en jefe, Obama dijo que lo “más frustrante” para él es que haya trabajadores que lo apoyen. Al respecto dijo que “no es serio” pensar que una persona criada “con cuchara de plata”, que nunca se ha preocupado por los demás, que no ha pagado “un centavo” en impuestos federales durante años y ha tenido conflictos laborales en sus empresas, sea visto como un campeón de los derechos de los trabajadores.

También mencionó sus insultos a las minorías y a distintos grupos de personas y su manera de tratar a las mujeres y aseguró que los rasgos de carácter y los defectos de un candidato no cambian cuando llega a la Casa Blanca, sino que lo que hacen es “magnificarse”.

“Florida, tenemos cinco días más para decidir el futuro de este país que amamos”, subrayó el presidente, quien también hizo un repaso de los logros de su gestión, entre los que destacó haber superado una de las peores crisis económicas de la historia reciente y haber acabado con Osama bin Laden, el cerebro de los atentados del 11 de septiembre de 2001. “Hay una razón por la que tengo el pelo blanco: he estado ocupado”, subrayó.

A su juicio lo que hace a Estados Unidos “grande”, en una alusión al lema de campaña de Trump (Make America Great Again), es su pueblo y la alianza de todas las personas sin importar raza, religión, si son latinos, blancos, afroamericanos, discapacitados o gais. “Esa es la América que queremos”, “nuestra diversidad es nuestra fuerza”, dijo.

A juicio del presidente, en la papeleta de votación está “la democracia, la decencia, la justicia y el progreso” y votar por Clinton es asegurarse una reforma migratoria y un aumento del salario mínimo, entre otras muchas cosas. - Efe