ESTAMBUL. Miembros del proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK) lanzaron un coche bomba contra un control de carretera establecido al lado de una gendarmería en la provincia de Hakkari, fronteriza con Irak e Irán.
Según las primeras informaciones, ocho militares fallecieron en la explosión y cinco fueron evacuados a un hospital.
El ataque tuvo lugar en la carretera entre Yüksekova y Semdinli, en el este de la montañosa provincia de Hakkari, frecuente escenario de enfrentamientos entre el Ejército turco y la guerrilla kurda.
Ayer mismo, las Fuerzas Armadas turcas aseguraron haber matado a ocho guerrilleros en esta misma provincia, en la que realiza un amplio operativo desde el pasado 4 de octubre. El PKK y el Estado turco suspendieron en julio de 2015 un alto el fuego que había durado más de dos años y medio.
Desde entonces han muerto cientos de agentes de seguridad turcos y miles de guerrilleros en enfrentamientos, bombardeos y atentados.
El PKK, considerado terrorista por la Unión Europea, Estados Unidos y Turquía, inició su lucha armada en 1984 a favor de más derechos de la minoría kurda en el país eurasiático.