Brasilia - Unas 100.000 personas, según la Policía Militar, se congregaron ayer ante el Congreso Nacional en Brasilia y manifestaron su respaldo al juicio político que la oposición promueve contra la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, contra la que se convocaron multitudinarias protestas en todo el país. Según la Policía Militar, la de Brasilia fue una de las manifestaciones más multitudinarias que se han visto en las últimas décadas en la capital brasileña.

Como en casi todo el país, la mayoría de los manifestantes acudió vestido con los colores verde y amarillo de la bandera de Brasil y corearon lemas contra Rousseff, su antecesor y padrino político Luiz Inácio Lula da Silva y el Partido de los Trabajadores (PT), al que ambos pertenecen. La manifestación recorrió la Explanada de los Ministerios, una céntrica avenida en que la se sitúan todos los edificios del poder público, y concluyó frente al Congreso, en cuyos jardines miles de personas se ordenaron para formar la frase Fuera Dilma, mostrada por cámaras que acompañaron la movilización desde helicópteros.

La protesta transcurrió sin ningún tipo de incidentes, vigilada por unos 2.000 agentes de la policía y en un ambiente festivo, al igual que ocurrió en otras decenas de ciudades del país que hoy se han volcado a la calle para manifestar su descontento con Rousseff. Durante la mañana, la manifestación más multitudinaria se llevó a cabo en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, donde las autoridades se negaron a hacer un cálculo de asistencia, que varían entre 500.000 y un millón de personas.