madrid - La Policía Nacional ha detenido a un preso por captación y adoctrinamiento de yihadistas. El arrestado, que se encontraba preso en la cárcel de Segovia, es un hombre de origen marroquí, de 42 años, y está acusado de captación y adoctrinamiento de internos para convertirse en yihadistas y por amenazar en nombre del Estado Islámico con poner bombas en Madrid y Barcelona. El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, celebró la “eficacia” del Plan de lucha contra la radicalización violenta, con la detención de A. Chiakhi, primer detenido en España relacionado con actividades de terrorismo yihadista tras el 13-N, “fuertemente radicalizado”.
Instituciones Penitenciarias tiene a cerca de 180 presos sometidos a un plan específico de vigilancia por riesgo de radicalización yihadista. Esa cifra es superior al número de personas actualmente en prisión por haber cometido delitos relacionados con este tipo de terrorismo, en torno a 90.
En esa cifra total bajo vigilancia se incluyen personas que profesan la religión islámica o personas marginales y vulnerables susceptibles de ser captadas. Según los expertos, a la hora de hacer proselitismo en prisión, los radicales buscan principalmente presos que cumplan penas no superiores a los tres años y que puedan salir libres pronto con instrucciones de continuar sus actividades radicales en el exterior, sin descartar alguna acción terrorista. El Programa de Intervención con los Internos Islamistas en los Centros Penitenciarios, creado en 2014, es uno de pivotes de la estrategia centrada en los presos que pretender reclutar en la cárcel. - Efe/E.P.