naciones unidas - El pacto nuclear alcanzado entre Irán y las potencias del Grupo 5+1, que habilita el regreso de la República Islámica a los mercados internacionales, recibió ayer el visto bueno del Consejo de Seguridad de la ONU, que autorizó el comienzo del levantamiento de gran parte de las sanciones impuestas a Teherán.
Poco después, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, visitó Tel Aviv, donde hizo una enérgica defensa de la relación bilateral con Israel y aseguró que Washington hará lo posible para que este país se defienda si Irán viola el acuerdo nuclear.
El máximo órgano de decisión de las Naciones Unidas aprobó por unanimidad la resolución que permitirá la entrada en vigor en 90 días del acuerdo cerrado la pasada semana en Viena tras años de negociaciones entre Irán, por un lado, y China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia, más Alemania, por el otro. Según el texto, siete resoluciones de la ONU sobre Irán -y con ellas multitud de sanciones- dejarán de ser efectivas tan pronto la Agencia Internacional de la Energía Atómica verifique que el país ha cumplido ciertas condiciones incluidas en el pacto.
Entre otras cosas, Irán debe desmantelar en las próximas semanas dos tercios de sus centrifugadoras y reducir sus reservas de uranio enriquecido, de unos 12.000 kilos, a 300 kilos. Con ello, Teherán pasará de disponer de material “suficiente como para producir unas diez bombas atómicas a tener una fracción de lo necesario para fabricar una”, según la embajadora estadounidense Samantha Power. Un mecanismo recuperaría sanciones si Teherán incumpliera el pacto.
alemania, al ataque Apenas una semana después de que el Grupo 5+1 e Irán acordaran la solución a la cuestión nuclear, Alemania arrancó ayer con toda su artillería pesada el asalto a la economía iraní. Cuando aún no está seca la tinta del acuerdo de Viena, y a falta aún de muchos meses para que entren en vigor sus cláusulas, una delegación de funcionarios y empresarios alemanes encabezada por el vicecanciller y ministro de Economía, Sigmar Gabriel, llegó a Teherán para reabrir las relaciones bilaterales. Los alemanes quieren seducir a los israelíes y aprovecharse de sus prometedoras perspectivas económicas.
EE.uu., “sólido” También Ashton Carter se apresuró a hablar en Israel. “Nuestro compromiso con la defensa de Israel sigue siendo sólido como una roca”, aseguró en una rueda de prensa con su homólogo israelí, Moshé Yaalón, en el Ministerio de Defensa de Tel Aviv, primera parada de su gira de tres días.
La visita se interpreta como un intento de EEUU de aplacar la férrea oposición israelí al acuerdo alcanzado con Teherán. Carter lo calificó como un “buen acuerdo”. “Seguiremos reforzando la seguridad de nuestros aliados y amigos en la región, especialmente Israel, para ayudarles a defenderse de la agresión, garantizar la libertad de navegación en el Golfo y supervisar la influencia iraní”, manifestó Carter. - Efe