dakar - El exdictador chadiano Hissène Habré será juzgado, a partir de hoy en Dakar, como supuesto responsable de 40.000 asesinatos políticos y más de 200.000 casos de tortura registrados durante su mandato (1982-1990). El tribunal que dictará sentencia fue creado expresamente por acuerdo de la Unión Africana y Naciones Unidas, que posibilitaron así el primer órgano jurisdiccional internacional del continente africano. Será la primera vez en la historia que un dictador africano es juzgado por un tribunal de otro país africano y todo ello a instancias de sus propias víctimas, que fueron apoyadas por diferentes asociaciones internacionales de derechos humanos. Un centenar de ellas ha sido llamado a declarar en la vista de Dakar, que podría prolongarse durante tres meses.
“Sólo por pertenecer a un grupo étnico determinado, como los Hadjarai o los Zaghawa, podías ser arrestado”, recordó a Efe Clement Abaifouta, presidente de la Asociación de Víctimas. “Salir con vida de las prisiones del régimen no era tarea fácil. El Campo de los Mártires, la principal prisión militar de Yamena, fue apodada el país de los muertos andantes”,explicó Abaifouta.
Con el juicio de Hissène Habré, África pretende demostrar su capacidad para organizar un proceso de esta envergadura y garantizar a los acusados un juicio imparcial. El magistrado de Burkina Faso y antiguo miembro del Tribunal Penal Internacional de Ruanda Gberdao Gustave Kam presidirá la Sala, donde estará asistido por jueces senegaleses con larga trayectoria profesional. El exdictador no reconoce la potestad de este tribunal, cuya imparcialidad pone en entredicho, por lo que es previsible que no preste declaración. “El juicio se hará sin Habré, pues no participará en esta parodia de justicia montada por la Unión Africana y Senegal”, dijo a la prensa uno de sus abogados.
El juicio, que se celebrará en audiencia pública, será transmitido por la Radio Televisión Senegalesa con un retraso de 30 minutos en la señal. Se calcula que el proceso costará unos 9 millones de euros, de los cuales la mitad ha sido aportado por el Gobierno chadiano y el resto por la Unión Europea y otros gobiernos internacionales.
Hissène Habré fue presidente de Chad entre 1982 y 1990, cuando fue derrocado por el actual mandatario del país, Idriss Déby Itno, y desde entonces ha vivido exiliado en Senegal, donde fue detenido en 2005 por lo crímenes cometidos durante su dictadura.
El Gobierno de Habré sustentó su poder en un régimen de terror dirigido contra la población civil, especialmente en el sur del país (1983-1985), y contra varias etnias árabes como los Hadjerai (1987) y los Zaghawa (1989-1990), ordenando masacres y detenciones masivas cada vez que un líder local osaba levantar la voz. El pasado marzo, un tribunal chadiano condenó por tortura a 20 altos cargos del aparato de seguridad del exdictador que, junto al Gobierno de Chad, tendrán que pagar 125 millones de dólares para compensar a más de 7.000 víctimas de la represión. - Efe