madrid - Amnistía Internacional aseguró ayer haber "documentado" denuncias "consistentes" de "violaciones de Derechos Humanos", "palizas a detenidos" y "detenciones arbitrarias" cometidas por la Guardia Nacional, la Policía y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) desde el inicio de las manifestaciones contra el Gobierno, el 12 de febrero de este año. "Desde que comenzaron los violentos enfrentamientos durante las protestas en Venezuela en febrero, Amnistía Internacional ha recibido y documentado un número elevado de denuncias consistentes de violaciones y abusos de Derechos Humanos", afirmó en rueda de prensa el director de Amnistía Internacional España, Esteban Beltrán, quien aseguró que "las muertes por armas de fuego" registradas durante las protestas de los últimos meses han sido obra de "grupos progobierno", "algunos manifestantes" e "individuos no identificados".

Estas consideraciones forman parte del informe Venezuela: Los Derechos Humanos en riesgo en medio de protestas, elaborado por Amnistía Internacional y centrado en analizar la situación de los Derechos Humanos en Venezuela desde el inicio de las protestas. "AI ha documentado en este informe violaciones al derecho a la vida y torturas, violaciones a la integridad física con palizas a detenidos bajo custodia o en el momento de la detención. Amnistía ha documentado uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad, así como detenciones arbitrarias y violaciones al debido proceso judicial, con hechos como restricción al acceso de abogados a detenidos", relató el director de AI España. La ONG también documenta "vulneraciones al principio de presunción de inocencia por parte de autoridades gubernamentales al hacer declaraciones incriminatorias en el caso de la detención de algunos líderes de la oposición". "Estas violaciones de los Derechos Humanos han sido cometidas por la Guardia Nacional, la Policía y el Servicio de Inteligencia Nacional", añadió Beltrán. Amnistía también tiene constancia de que han existido "abusos", "amenazas" y "agresiones" contra periodistas y medios tanto críticos con el Gobierno que lidera Nicolás Maduro como afines al Ejecutivo. - E.P.