Pekín. El Gobierno chino mostró ayer su "fuerte malestar" por las órdenes internacionales de arresto emitidas por la Justicia española contra cinco exlíderes comunistas, entre ellos el expresidente Jiang Zemin y el ex primer ministro Li Peng, por la represión en el Tíbet. "China expresa su fuerte malestar y su firme oposición a las instituciones españolas que, ignorando la posición china y siendo inconsistentes con previas declaraciones, manipulan este asunto", señaló en rueda de prensa el portavoz de Exteriores chino Hong Lei. "Esperamos que las partes relevantes en España tomen con seriedad la preocupación china y no hagan nada que dañe a este país o la relación entre China y España".
Hong señaló que China ha pedido a España que clarifique la decisión y culpó a "separatistas tibetanos" de "crear rumores y calumnias, haciendo acusaciones falsas contra el Gobierno chino, para dañar sus relaciones bilaterales con otros países". "Esas acciones están condenadas a fracasar", añadió el portavoz, quien puntualizó que la posición china en el conflicto tibetano es "clara y consistente" y que España "también sabe eso".
La AN española dictó órdenes internacionales de detención contra Jiang, presidente de China entre 1993 y 2003. Las órdenes también afectan a Li Peng, primer ministro chino a finales de los años 80 y principios de los 90, y Qiao Shi, exjefe de la seguridad china y responsable de la policía armada. Los otros dos afectados son Chen Kuiyuan, exsecretario del Partido Comunista en Tíbet y Peng Peiyun, exministra de Planificación Familiar.