moscú. El primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, proclamó ayer que el partido del Kremlin ha recuperado el respaldo popular, que perdió por las denuncias de fraude, durante un congreso en el que el gran ausente fue el presidente, Vladímir Putin. "El partido ha recuperado la confianza del pueblo. También me gustaría decir que Rusia Unida (RU) ha demostrado que solo necesita la victoria si es por medio de una honesta lucha política", dijo Medvédev durante el congreso federal en la capital rusa.
Medvédev, debilitado por los insistentes rumores de destituciones en el Gobierno debido al estancamiento de la economía, recuperó ayer el protagonismo tras meses a la sombra del jefe del Kremlin.
El delfín de Putin apenas había hecho acto de aparición en los últimos tiempos y su perfil es cada vez más bajo, mientras el líder ruso es omnipresente, ya sea para proponer un plan para el arreglo pacífico en Siria, defender los programas sociales o arremeter contra la oposición.
RU es quizá la única plataforma en la que Putin no puede hacer sombra a Medvédev, ya que este es el presidente de la formación, que sufrió un duro varapalo en las elecciones legislativas de 2011, en las que la oposición denunció fraude masivo y protagonizó las mayores protestas antigubernamentales desde 1991. Por eso, Medvédev destacó ayer que una de las lecciones que se puede extraer de las elecciones municipales del 8 de septiembre es el hecho de que la formación oficialista recuperara la "supremacía" en ciudades en las que salió derrotada hace dos años. "Hemos recuperado el derecho a liderar en el marco de una nueva situación política", proclamó.