damasco. Los rebeldes rechazaron ayer el acuerdo entre EEUU y Rusia para desmantelar el arsenal químico de Siria. En este sentido, el jefe del opositor Ejército Libre Sirio (ELS), Salim Idris, expresó su repulsa hacia dicho acuerdo, que, aseguró, no frenará la lucha de los insurgentes contra el régimen de Bachar al Asad.

"No estamos interesados en ninguna parte de la iniciativa porque nosotros no tenemos armas químicas. Mis colegas y yo continuaremos los combates hasta la caída del régimen", prometió Idris en una rueda de prensa en Estambul transmitida por las televisiones árabes.

De esta forma, el líder insurgente reaccionaba al pacto alcanzado entre el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, y el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, después de tres días de reuniones en Ginebra.

Idris lamentó que en la iniciativa no se hable ni del pueblo sirio ni del armamento convencional: "Es como si la sangre de los sirios fuera un puente para destruir solo las armas químicas", se quejó.

Además, para el dirigente del ELS, "no es posible que un criminal entregue la herramienta del crimen y se le deje libre. Hay que llevar a al Asad ante tribunales internacionales". Tampoco le inspira confianza Rusia, porque, en su opinión, "es socio en el asesinato de los sirios". De hecho, "vemos en la iniciativa una estrategia para ganar tiempo y encontrar una salvación para el régimen criminal", subrayó.

Idris denunció que en los últimos días han recibido informaciones de que las autoridades sirias están trasladando las armas químicas al Líbano e Irak para ganar tiempo.

Pese a su rechazo al plan, Idris indicó que el ELS no va a obstaculizar el trabajo de los inspectores internacionales que lleguen a Siria para verificar el desmantelamiento del arsenal químico. "Facilitaremos sus movimientos, pero no va a haber un alto el fuego", avisó.

las instalaciones Desde la capital siria, el ministro de Reconciliación, Ali Haidar, afirmó que los inspectores internacionales podrán acceder "fácilmente" a las instalaciones. "Creo que los inspectores internacionales podrán hacer su trabajo, porque todas las instalaciones del Gobierno no son solo seguras, sino también accesibles", dijo a Efe Haidar.

El titular de Reconciliación insistió en que los lugares donde se encuentran las armas químicas "todavía están protegidos por el Gobierno sirio, por lo que el acceso será bastante fácil". "Siria necesitaba de un alivio de la presión internacional. Queremos proteger a nuestro pueblo y no ser arrastrados hacia un conflicto impredecible con los EEUU", apuntó.