jinan. El tribunal que juzga al exdirigente chino Bo Xilai anunció ayer su intención de prolongar un día más el proceso, después de que el acusado volviese a negar todos los cargos en su contra. El tribunal de la ciudad de Jinan quiere escuchar hoy más testimonios contra Bo, que está acusado de corrupción y abuso de poder, informó un portavoz de la corte. En el segundo día de juicio, y respondiendo a preguntas del fiscal, Bo aseguró que su mujer, Gu Kailai, "está loca". "Ha cambiado, está loca (y) siempre miente", dijo Bo después de que los fiscales proyectasen un vídeo en el que Gu hablaba de las ayudas financieras y de otro tipo recibidas por la familia de parte del empresario millonario Xu Ming. "El personal que lleva el caso la presionó mucho y le pidió que me implicara y ella tiene problemas psicológicos", agregó Bo.
Gu Kailai fue condenada en septiembre a pena de muerte en suspenso por el asesinato del británico Neil Heywood, con quien la familia tenía negocios y al que posteriormente la mujer de Bo acusó de haberle reclamado dinero y de amenazar a su hijo. Bo está acusado de supuestamente haber conspirado para ocultar el crimen de su mujer. Además, se le acusa de haber aceptado 21 millones de yuan (2,5 millones de euros) en sobornos.