ROMA. El proceso, que se celebra en Grosseto (centro de Italia), se aplazó al 17 de julio, ya que, como estaba previsto, algunos de los abogados que participaran en el juicio, entre ellos el defensor de Schettino, Domenico Pepe, declararon su adhesión a la huelga.

Por ello el presidente del tribunal, Giovanni Puliatti, tuvo que aplazar la sesión a la primera fecha disponible.

En el naufragio murieron 32 personas, entre ellas un español y dos peruanos, y de estas víctimas dos cuerpos aún no han sido recuperados.

A pesar de que se preveía el aplazamiento del juicio, Schettino acudió al aula situada para la ocasión en el Teatro de Grosseto para dar cabida a las partes y al público.

Antes de entrar en el aula para comunicar su adhesión a la huelga, el abogado del comandante explicó que espera que se esclarezca de una vez por todas la verdad y que el tribunal tenga en cuenta que en el proceso paralelo contra otros imputados por el naufragio se están pactando penas mínimas, mientras que sobre Schettino se han pedido 20 años de reclusión.

El abogado afirmó que Schettino ha admitido sus propias culpas al acercar el crucero a la costa, lo que provocó su impacto con un escollo, pero que después actuó con responsabilidad para salvar la vida de los pasajeros, así como negó que abandonase la nave al reiterar que el capitán "se cayó a una de las lanchas".

El pasado 22 de mayo, el juez de la audiencia preliminar Pietro Molino decidió el envío a juicio del comandante Schettino bajo la acusación de homicidio culposo múltiple, abandono de la nave, naufragio y de no haber informado inmediatamente a las autoridades portuarias de la colisión contra el escollo que provocó el naufragio el 13 de enero de 2012.

En este juicio, se han presentado como 242 partes demandantes, entre pasajeros, grupos ambientalistas, ayuntamientos y también el grupo Costa Cruceros, al que pertenecía el barco.

La fiscalía ha citado a declarar a 338 testigos, mientras que el abogado de Schettino a 96 y las partes demandantes a 575.

Ayer, también tuvo que aplazarse por el mismo motivo al 20 de julio, la audiencia preliminar del proceso paralelo que decidirá si admitir las penas pactadas (entre uno y dos años de reclusión) por los otros acusados del naufragio: el responsable del puente de mando, Ciro Ambrosio; la oficial, Silvia Coronica; el timonel Jacob Rusli, el jefe de los servicios de a bordo, Manrico Giampedroni, y el jefe de la unidad de crisis de Costa Cruceros en tierra, Roberto Ferrarini.

En la noche del 13 de enero de 2012, el crucero Costa Concordia encalló a pocos metros de la isla del Giglio tras haber chocado contra un escollo durante una maniobra realizada por el capitán para acercase a la costa y que se conoce como un "saludo".

Desde el impacto hasta que se produjo el desembarco de los 4.229 pasajeros y miembros de la tripulación pasaron varias horas sin que se diese la orden de abandonar el barco y éste, debido a la entrada de agua, se inclinó poco a poco.

Schettino está desde el 5 de julio en libertad, después de que la jueza Montesarchio decidiese sustituir el arresto domiciliario dictado por ella misma el 17 de enero por la obligación de someterse a controles rutinarios en el municipio en el que reside, Meta di Sorrento (sur).

En las fases previas, la compañía naviera Costa Cruceros llegó un acuerdo por el que deberá pagar un millón de euros como sanción administrativa por el naufragio del buque Costa Concordia, de su propiedad y ahora se ha presentado como parte en el juicio contra Schettino.