sofía. La fragmentación del Parlamento salido de las legislativas celebradas el domingo en Bulgaria hace temer un vacío de poder de imprevisibles consecuencias, que puede generar aún más frustración entre una ciudadanía castigada por la crisis.
La paradoja es la siguiente: la Cámara baja salida de unos comicios anticipados debido a la caída de un Gobierno por las protestas contra la penuria económica, no parece capaz tampoco de dar respuesta a esa situación. El marasmo es aún más grave dada la creciente desconfianza de los búlgaros ante la política y la desilusión ante unos partidos tradicionales a los que ven como corruptos y defensores de los oligopolios.
La participación en las elecciones del domingo, de alrededor del 50 por ciento, es la más baja desde la llegada de la democracia en 1990.
ganador "por la mínima" El vencedor, por estrecho margen, es la formación conservadora del ex primer ministro Boiko Borisov, que dimitió en febrero tras una oleada de protestas contra los altos precios de la energía y contra la corrupción.
El Partido Socialista quedó en segundo lugar a escasa distancia de los conservadores, mientras que otras dos formaciones menores también entraron en el Parlamento. Todas han rechazado pactar una coalición con los conservadores.Tampoco hay visos de cualquier otro pacto con mayoría de Gobierno. "Tuvimos que elegir entre '¡qué pesadilla si éstos se quedan en el poder!' y '¡qué pesadilla si los otros vuelven al poder!'", explicóel informático Stefan Myankov, de 32 años, que bien podrían resumir a gran parte de los jóvenes que critican a las grandes formaciones.
Según los últimos datos de Eurostat, el 22% de los 7,3 millones de habitantes del país vive con el salario mínimo de 155 euros, mientras que casi la mitad de la población -un 49 %- corre el riesgo de caer en la pobreza.
Nada más conocer las primeras proyecciones de voto la noche del domingo, cientos de manifestantes protestaron contra los resultados en el centro de Sofía coreando eslóganes contra los conservadores, pero también contra los socialistas.
