berlín. La Justicia alemana abrió ayer el juicio por terrorismo y asesinato múltiple contra la neonazi Beate Zschäpe, único miembro vivo del grupo Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU), que causó la muerte de 8 ciudadanos de origen turco, un griego y un policía. Se la juzga junto a cuatro presuntos cómplices, cuyos vínculos se revelaron tan tardíamente como todo lo que rodea al caso, y en medio de sospechas de encubrimiento policial. El juicio quedó interrumpido finalmente hasta el 14 de mayo, como pidió hasta dos veces la abogada de Zchäppe. Foto: efe