Sofía. Las múltiples protestas que se han desarrollado durante los últimos días en Bulgaria contra los elevados precios energéticos provocaron ayer la dimisión del Gobierno liderado por el populista Boiko Borisov. Se trata de una renuncia que el propio Borisov había descartado 24 horas antes y que al final se formalizará hoy, con una moción de censura en el Parlamento, donde el gobernante partido GERB dispone de 117 de los 240 escaños. El jefe del grupo parlamentario del GERB (Ciudadanos para Desarrollo Europeo de Bulgaria), Krasimir Velchev, dijo ayer que sus diputados votarán a favor de la moción, apoyada por otros dos partidos, lo que eleva a 194 los votos en contra del Ejecutivo. Borisov no compareció ayer pero justificó en una carta su dimisión por no poder participar "en un Gobierno en el que la Policía pelea con la población". Foto: efe
