islamabad. Tres nuevos asesinatos elevaron ayer a nueve el número de trabajadores de la campaña de vacunación contra la polio asesinados en Pakistán en las últimas 48 horas, en lo que parece una ola de crímenes coordinada por la insurgencia talibán. A las muertes de un vacunador el lunes y de cinco mujeres el martes en Peshawar y Karachi, se sumaron ayer las de dos miembros de los equipos sanitarios y un conductor en las ciudades de Peshawar y Charsada, en la provincia septentrional de Khyber Pakhtunkwa (KPK). En todos los casos, los trabajadores fueron atacados por enmascarados que dispararon desde motocicletas para luego darse a la fuga. A pesar de que la ola de crímenes llevó el martes al Gobierno federal a ordenar la suspensión de la campaña en las zonas afectadas, el Gobierno regional de KPK desoyó la instrucción y decidió continuar ayer con la vacunación de tres días a pesar de las amenazas contra la seguridad. Sin embargo, tras las nuevas muertes, las dos agencias internacionales que apoyan a las autoridades locales en la lucha contra la polio, Unicef y la Organización Mundial de la Salud (OMS), han decretado la suspensión de actividad de sus equipos. "La ejecución de la campaña depende de la Administración local, nosotros somos solo organismos asesores, pero hemos indicado a nuestro personal que detenga las actividades", explicó el portavoz de Unicef en Pakistán, Michael Coleman. Aunque no ha habido ninguna reivindicación formal, las sospechas apuntan a la insurgencia talibán (agrupada en Pakistán bajo las siglas TTP), ya que grupos afines a ella en las áreas tribales amenazaron en verano con atacar a los vacunadores. Lo que en principio fue un boicot de algunos para reivindicar mejoras económicas ante la administración local se convirtió rápidamente en una campaña contra la vacunación con argumentos que hicieron fortuna entre los locales. Una de los primeras justificaciones que dieron los talibanes a las amenazas contra los vacunadores es que estos eran espías de EEUU, como lo era un médico paquistaní que participó en las labores de localización de Osama bin Laden.