ROMA. El decreto del alcalde romano Gianni Alemanno, firmado el 1 de octubre y vigente hasta al 31 de diciembre, fue publicado el miércoles en la web del ayuntamiento.
En él se prohíbe pararse a comer, beber o cualquier forma de acampada "en zonas de particular interés histórico, artístico y arquitectónico" del centro romano.
Según el decreto, estas restricciones son necesarias porque en las principales atracciones turísticas de la ciudad no se respetan "las normas más elementales de decoro urbano", y la gente derrama bebida o tira comida en las plazas, escaleras o fuentes históricas.