Nueva Delhi. Dos personas murieron y otras 62 resultaron heridas en protestas violentas en la ciudad de Bombay (oeste de la India) contra las recientes matanzas de musulmanes registradas en la región india de Assam y en Birmania.
"Ocurrió este sábado por la tarde y al menos 24 de los heridos son policías. La situación está tranquila y bajo control, aunque la ciudad se mantiene en alerta", dijo ayer a Efe un responsable de la célula de gestión de desastres de la capital financiera de la India.
De acuerdo con medios indios, los muertos son dos jóvenes musulmanes que participaban en las protestas, y al menos cuatro fotógrafos de prensa también resultaron heridos. "Está en marcha el mes de ramadán, y dado que hubo varias explosiones en Pune y que se acerca la conmemoración del día de la independencia, hemos decretado una alerta en la ciudad", aseguró a los medios el jefe local de Policía, Arup Patnaik.
Unas 25.000 personas convocadas por distintas organizaciones musulmanas se reunieron el pasado sábado en el sur de Bombay para protestar por los ataques contra musulmanes recientemente en Assam y en Birmania. Tras varios encendidos discursos de los convocantes, parte de la multitud comenzó a tirar piedras contra los autobuses públicos y prendió fuego a seis furgonetas de la Policía y de los medios presentes para cubrir las manifestaciones. La Policía comenzó a cargar y a disparar al aire para dispersar a la multitud, según medios indios.
Al mismo tiempo, 51 personas morían y 25 resultaron heridas al precipitarse un autobús por una garganta montañosa en el Norte. El autobús estaba preparado para 44 pasajeros y llevaba 75.